sábado, 4 de octubre de 2008

Talata

-El doctor, el doctor, yo voy, yo voy-desesperada Soledad acudía a la puerta y, antes de abrir, se preocupaba de estar ordenada para la nueva visita. Acto seguido emitió los correspondientes gritos para recibir un aullido agudo de violín.

-Bonas noites diablas y diablos, espero que aquel trono me espere cómodo y con una buena copa de sangre. Me presento, Doctor Diman Vitalius, rector de la facultad de ciencias de la universidad nacional, es un gusto ser parte de esta “fiesta”-se presentaba con una reverencia y haciendo ademanes con el arco del violín.

-Bienvenido Diman, es un gran placer contar con tu asistencia esta noche de luna llena, por favor siéntate para presentarte al resto del círculo-le invita la monje amablemente, el doctor toma asiento de inmediato y la dama se prepara para una larga presentación- Me gusta empezar por mí, llámenle elogatría, narcisismo, cómo quieran, igualmente lo haré. Soy Samanta, monje mayor de los conventos del infierno, a uno de mis lados se encuentra Andrea Drake afanado músico ocultista y cabeza del movimiento secreto del macho cabrío. A mi otro lado se encuentra el Duque Álastor, dueño de la mayoría de los pubs, bares y moteles del reino. Y allí está Lord Marco Latorre, mandatario de la legión templaria perdida. Ahora, se preguntarán quien completa el círculo esta noche, la respuesta siempre ha estado frente a uds, corriendo por aquí y por allá, ¡Soledad, ven y siéntate donde te corresponde!

Samanta sabía que este hecho iba a impresionar a los demás, pero confiaba plenamente en las habilidades de su compañera, pues Soledad había acompañado hace unos días a la monje para buscar a los participantes del círculo y encontrar la forma de invitarlos a dicha reunión, en estos días forjaron un fuerte lazo de amistad.

Al duque le agradó bastante la idea, la sirvienta había atraído su intención bastante y le intrigaban las capacidades que podría tener una descendiente de la casta de los Diavoleri. Igualmente, al doctor le pareció fabuloso completar el círculo con la pequeña. A Andrea le daba lo mismo, con tal de pronto saber el motivo de esta invocación y su papel en la misión. Sin embargo al templario no le gustó mucho la idea, no veía mucho éxito en tal pequeña figura femenina. Este hombre había sido educado de una antigua forma, era el más frío y cruel de los otros participantes de la orden, para él sólo importaba llevar a cabo el fin de toda misión personal.

La joven vampira se sentó un poco cohibida en un principio, pero después nació de ella una presencia imponente que no había expresado en toda la velada. Tomando con mucha fineza su copa, probó con gran placer la sangre que tanto le había esperado allí, demostraba con ello su fuerza de voluntad.

-Bueno, bueno, procedo a explicarles que hacen aquí-rompió el silencio Samanta, mientras avanzaba, su seriedad aumentaba- esta noche de luna llena han sido llamados los seis mandatarios más fieles a las leyes del círculo, los más grandes representantes de las voluntades de la figura creada por la sociedad: El Diablo. Nosotros somos los seis hijos primogénitos de Satanás en este momento, los elegidos para evitar la mayor atrocidad jamás intentada por el hombre y, lo que es más grave aún, por la Iglesia: Demostrar la teoría de concentración del mal.

-¿Concentración del mal?-preguntó boquiabierto Andrea, de su boca babeaba sangre.

-Así decidieron llamarla, consiste en concentrar todo el mal existente en la tierra humana en un organismo vivo, en este caso, un niño-al salir dicha palabra de sus labios, su voz se quebró un momento, se detuvo a tomar un sorbo de sangre y continuó-este plan ha sido desarrollado por un gran grupo de científicos, elegidos por la Iglesia, en las dependencias de la Corporación. Justamente en el edificio central, ubicado a un costado de la plaza de armas. Nuestro deber es salvar al niño de la fatal sentencia y conservar el equilibrio social al cual el hombre no se puede negar, nosotros cultivamos lo que es vital pero muy ocultado, hasta el mismo Obispo comete atrocidades, comete crímenes, siente deseos sexuales, es goloso, le dan ganas de darse tendido a la oscuridad un momento. Sabemos muy bien que hay quienes no merecen ninguna crítica, monjes y sabios que han llevado un estupendo camino de iluminación y están completamente fuera de nuestras leyes, pero que la Iglesia venga con cuentos de santidad, Jesús se crucificaría antes de pisar al Corporación-se detiene a beber otro resto de sangre-¡Compañeros! Tenemos los contactos suficientes, los espías necesarios, la mano de obra fiel para llevar a cabo esta misión con cautela y éxito, ¡En nuestras manos está la vida del pequeño y la vida de todos los hijos de su demonio! ¿Qué me dicen?

-Pues, si estamos aquí es por algo y nuestros roles están en juego, no tenemos tiempo que perder. Ahora mismo puedo largarme a buscar espías que se introduzcan en la corporación y en la Iglesia, seguro que su santidad ha pisado mis infiernos-respondió preocupado el duque Álastor.

-Apoyo la palabra del señor duque-agregó Soledad, sonriéndole al joven- No podemos seguir perdiendo el tiempo en cortesías y diplomacia, sabemos muy bien que todos luchamos por una misma causa y nuestro bien común.

-Hmmm… No se que mucho podrá hacer un templario añejo en esto, sin embargo, ¡Mis fuerzas están con la causa!-vociferó el armado.

-¡A darle caña! Jajaja, seguro que Satán vencerá esta vez, algún día que le toque ¿no?-selló el músico, relajado y confiado.

-Si necesitan ciencia, aquí estaré-aprobó el médico.

-Muy bien, muy bien, no me esperaba menos de uds, son lo que pensé que serían. Ahora bien, esta noche los hombres de la corporación se dedicarán a celebrar el hecho de encontrar una fecha exacta para la ejecución del infante, nosotros nos dedicaremos a afiatarnos y reflexionar sobre los pasos a seguir, al alba descansaremos, para empezar los movimientos la noche que sigue. Estos han sido expresas órdenes de quien convocó a esta organización, el heredero de la dinastía Capodelli, los fundadores del círculo-determinó la monje.

-¿Y dónde está aquel mandatario? ¿No debería estar aquí junto a sus elegidos?- cuestiona el templario.

-¡No!, él nos ha encomendado a nosotros la completa acción del círculo, seguramente estará viajando a lo largo del mundo buscando en suburbios a los fieles al círculo, algunos aún están perdidos-respondió Samanta- Ahora quiero que descubran sus habitaciones y reflexionen a solas, nos veremos aquí un poco antes del alba para determinar tareas, yo misma iré a buscarlos, ¡Adieu!-terminó levantándose de su trono y pendiéndose en la penumbra.

-Yo les indicaré sus habitaciones, uno por uno. Doctor, acompáñeme por favor-pidió Soledad, mientras se levantaba y hacía un gesto de invitación al médico.

A los dos se los tragó la sombra, los restantes terminaban sus tragos y miraban al vacío, reflexivamente. A los minutos volvió la vampira para invitar al templario a su habitación, luego de un rato lo hizo con el músico.

-Sólo queda ud, señor duque-le invitó sonriendo-yo lo llevaré a su lugar de descanso, manténgase cerca de mí por favor.

-Perfecto mi lady, a tú lado con gusto-le siguió Álastor, quien ya se había interesado en la dama y pretendía conocerla mejor en el transcurso de la misión-aun que te advierto que tropiezo con facilidad Jejeje.

-No se preocupe, no hay mayores obstáculos en el pasillo y yo puedo ayudarle en caso de que se tropiece-le respondía, con un poco de nerviosismo la joven.

-El camino se me hace eterno, sabes, aun que me siento muy bien caminando en un vacío y guiado por una vampira, esto ni en mis mejores sueños- comentaba a modo de forjar la confianza.

-A ud le interesan mucho los vampiros, ¿Qué relatos y leyendas conoce sobre nosotros?-le pregunta mirándolo a los ojos, se ha creado un vínculo especial entre los dos y todo se detiene en un instante.

-Pues muchísimas, cuando pequeño mi abuelo me contaba de sus aventuras por las noches en barrios de vampiros, donde estos planeaban desaparecer de la vista humana-le dice mirando hacia otro lado, pues estaba un poco nervioso.

Soledad lo mira con cariño, en tan poco había sentido una gran atracción por el muchacho, sin embargo, sentía que debía conocerlo muchísimo más. Notaba que era correspondido, pero no sabía si era tan real.

-¡Aquí es!-se detiene la vampira, y le señala la puerta-la habitación número 12, es bastante cómoda y podrá hacer lo que guste sin molestar a los demás, pues todos estamos separados por dos piezas.

El duque abre la puerta y queda bastante conforme con lo ve, pero siente un poco de tristeza de tener que despedirse de la señorita. Sabía que era el momento del “hasta luego”, no quería pronunciarlo.

-Ehm…Bueno…-rompe el silencio la joven-ahora le dejo reflexionar, más tarde vendrá Samanta a convocarle. Luego descansará, no se preocupe, si sucede algo dentro del día nos avisarán los buitres que rondan la corporación.

-¿Buitres?-le pregunta el joven, en parte porque le preocupa saber sobre dichos seres y en parte para estar más con ella.

-Si, buitres, servidores del círculo que parecen ser simples civiles, pero son espías muy eficientes, podría hasta uno estar trabajando en el mismo plan de ejecución… ¿Quién sabe?-le responde, mirando al suelo esperando el actuar del joven.

-Claro, todo es posible dentro del Caos de esta orden Jejeje, en fin… Ha sido un gran placer conocerle mi lady-le confiesa, tomándole la mano para besársela y esperando a que le mire a los ojos. La vampira lo hace-espero que descanse bien, entre oscuros sueños… ¡Adieu!-termina haciendo una reverencia.

-¡Adieu mi lord!-se despide la joven copiando el gesto final del muchacho, para luego dar unos pasos entre la sombra y desaparecer.

Álastor miraba hacia donde creía que podía encontrarse, se quedó en la puerta un momento reflexionando, ¿Qué estaba pasando? ¿Tanto le podía atraer una vampira? Es que realmente era hermosa y tener ese vínculo especial le estremecía su ser. Finalmente entró y cerró la puerta suavemente.

Luego de una hora, llegó Samanta preguntando por las sugerencias y críticas del duque, acordaron que este último saldría a hablar con el jefe de la milicia oriental, Kanamoto, para así tener más aliados y asegurar un trabajo de calidad. Al llegar el alba, todos los componentes del círculo dormían en sus camas, sabiendo que, al despertar, las cosas se pondrían intensas.

2 comentarios:

Lilioshka Leliv dijo...

Mhhhhhhh... interesante aquello del naciente idilio, cosas así no pueden faltar, ¿cierto? Lo digo porque es la naturaleza de los seres vivientes, y no hay aventura ni misión sin una buena dosis de .. no sabría como llamarlo en este momento.

Me gusta leer acerca de conciliábulos secretos jajaja , y más me gustaría participar de uno. Algún día ..

Besitos attooooooo ^^
Como ya he dicho en comentarios anteriores,espero con ansias el próximo capítulo, porque éste ha estado de pelos !!

Anónimo dijo...

me gusta como escribes, dejas todo ese "misterio" par alos lectores..
Este post es bien cortito.. u.u

te quiero mi LORD! y no está solo.. recuerde eso. Si nadie te acompaña estoy yo (no pa' dar "lástima" tampoco) uté sabe a qué me refiero. =)

atte. Lady x)

"Estoy más cerca de lo que tú crees, estoy más cerca que "a tu lado", estoy donde no puedes evadirme, donde no puedes esconderte.. Soy Parte de Tí..."